La
familia zapata se había enriquecido, como casi todas las demás fortunas
cartageneras de la época, gracias a la minería. La casa que proyectó Víctor
Beltrí, en 1909 para los zapata , se levantó en un lugar privilegiado de la
plaza de España y para ello se utilizaron las piedras del derribo de la
muralla.
Se
trata de un chalet roseado de un jardín pintoresco, cerrado por un hermoso
muro. El de inspiración gótica muy frecuente en Cataluña.
El
medievalismo goticista se hace especialmente evidente en las ventanas con arcos
trilobulados y en la torre almenada, que constatan con otros elementos como
esbelta cubierta de zinc de la torre central, el pórtico sobre columnas, las
galerías de la parte trasera o los hermosos remates de influencia vienesa del
muro exterior. Estos elementos dan al conjunto un toque eléctrico y cosmopolita
que suaviza el neogótico catalán dominante.
En
el interior de la construcción se encuentra un amplio vestíbulo del que arranca
la escalera de mármol con barandales modernistas. En el centro del edificio , a
modo de eje en torno al cual gira la ordenación interna de la planta, hay un
magnifico patio cubierto por una vidriera, de estilo árabe que inspiró. Todas
las habitaciones se abren al exterior y a las galerías del patio, y a su vez están comunicadas entre sí, creando de esta manera un segundo recorrido en el palacete.
Actualmente,
la casa Zapata se encuentra transformada en colegio y semioculta por
construcciones posteriores que, además han sustituido la mayor parte del jardín
y un buen tramo del muro exterior.
información sacada del libro
"ITINERARIOS DIDÁCTICOS", "CARTAGENA MODERNISTA"
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