¡Acaso pensaban que todo estaba escrito en sus destinos! Juntos ambos dos permanecieron hasta el final de sus vidas. Afortunadamente o por desgracia, él era enano, lo cual le garantizaba su estancia en el circo junto a ella. Por su parte, ella era una trapecista de gran belleza ante los ojos de cualquiera. Seguro que aquella mujer pensaba en él, pero no sé lo decía. Pues no habrían tenido la oportunidad de conocerse bien, o quizás sí, pero con otras vistas: sólo amistad. Esta amistosa relación que tenían era tan especial , muy parecida a la que se procesaba con su parteneur. Se pensaría él. Y es que una noche, estando cenando todos juntos después del largo viaje emprendido, aparcada la caravana en el camino, ésta le dedicó una mirada ligera, pero no tan superficial, qué para él lo decía todo ¡Era tan profunda!. Todo su fuego estaba encendido, en torno a esa hoguera. Junto a las unánimes brasas que allí habían, comían manjares de reyes: muslos de pollo asado. Todo era perfecto, hasta ese momento. Él la miró, mientras que ella le correspondió, pero por entonces, llegaría su prometido a estropear ese instante, porque se la llevó de su lado y su cara le cambiaría de forma inmediata y repentina. Al siguiente día, él creyó poseer sus prendas íntimas tras entrar en su vagón y oliéndolas notó su aroma. Ahora más que nunca le correspondería sellar su amor por lo que cogió un anillo y en un ciclomotor haciendo de paquete, un amigo lo llevó hasta ella, para salirle a su encuentro. Pero para entonces vería cómo llegó a encontrársela con su amado, tras haber pasado la noche. Por lo que, aquel enano, para demostrarle su amor, se fue a la cancha del circo sin dar más explicaciones. Ciego de amor cogió el trapecio para mostrarle sus sentimientos ahora heridos. Tan grandes fueron que sobrevoló su alma sobre todos aquellos circenses cuando llegaron a ver como éste se precipitó al vacío. Tal vez, asistiendo así, a su triste final, pero también pudo ser que fuera el de ella, tras aquel susto y posible desvanecimiento. Quizás fuera como un despecho de aquel hombrecito, a quien lo habría imaginado en uno de sus desvaíos. Al no conseguir su objetivo: que ella se fijara en él, habría logrado que por un momento lo hiciera pero con un trágico final. El caso es que él tiró el anillo a su cetro en el que caía tierra de por medio, mientras los allí presentes en el funeral se iban y aquí acaba la historia, largándose cada cual por su sitio…cuando todo lo que quiero eres tú. ¡Oh, siempre tú! Solo tú. ¡Todo lo que quiero eres tú! ¡Todo lo que quiero eres tú!
Todo lo que quería… eres tú.
Opinión personal: Esta es la historia un tanto abstracta que se ha podido dar de las dos formas descritas, es decir, la supuesta muerte de uno o la del otro. Descritas por allá en Irlanda, puesto que U2 son irlandeses arraigados acérrimamente a sus costumbres y vivencias y no se andan con juegos sino con una gran parte de cosas que hacen una realidad tanto social, política, humana, la cual reflejan, a veces, en forma de historia en sus canciones. A mí, esta es una canción que particularmente me encanta de ellos y una gran balada sin duda. El vídeo que describo podéis verlo en Dailymotion U2 All I want is you. También es de U2 originario.
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