Drácula: la leyenda jamás contada es una película estadounidense dirigida por Gary Shore y protagonizada por Luke Evans que se estrenó en 2014 y contó entre su reparto con Sarah Gadon y Charles Dance.
Esta versión no se parece en nada a ningún drácula visto antes, es mas épica y no se centra tanto en chupar la sangre. Los turcos le piden al príncipe mil niños incluido su hijo para un ejército.El príncipe se niega y mata a un grupo de turcos para salvar a su hijo, luego tendrá que enfrentarse a un ejercito entero de turcos por lo que decide buscar la ayuda de un vampiro. El príncipe va a una cueva de la montaña donde pacta con el vampiro al beber su sangre. Ahí adquiere los poderes de la noche, fuerza, velocidad y el control de las criaturas de la noche como los murciélagos con los que derrotará a los turcos. Si pasados tres días no ha bebido sangre el maleficio se romperá y Drácula (El príncipe) volverá a ser humano, salvándose de ser un vampiro para siempre, pero esto no ocurre, al final su mujer muere y drácula bebe su sangre convirtiéndose en vampiro y sacrificando su vida y a su pueblo por la vida de su hijo, que amparado por los monjes llegará a ser rey en un futuro.
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