Franco Battiato, un recorrido sentimental

Quién es Franco Battiato se preguntaran las jóvenes generaciones alejadas de la España de los  80, los programas de TV como “La bola de cristal” o “Tocata”. El efecto Battiato en los españoles de los años 80 le llevo a vender miles de discos en su versión castellana. “Los nómadas” que caminaban inocentemente a las ciudades del Norte se han trasformado trágicamente en oleadas de refugiados de miserias y guerras, rechazados en uno y otro lugar. El “Yo quiero verte danzar” ese himno a la multicultularidad, se ha trasformado en una riña a garrotazos entre culturas, religiones, países, regiones ciudades. Sobre el puente del hermoso galeón de la humanidad ya no ondea la “Bandera Blanca” sino la negra de la desesperación .Los sueños de la “Perspectiva Nevski” viajan en portaviones de la armada imperial de Putin , Leningrado ya no existe y bajo sus ruinas todo se mira peor . “El tren a Tozeur” ya no pasa tan habitualmente después de la resaca de la Eurovisiva “Primavera árabe” con Alice. Los “Centros de gravedad permanente” han desaparecido bajo el manto del relativismo materialista. Franco Battiato es un músico siciliano nacido el último año de la Guerra Mundial (1945) en el seno de una familia humilde. Su padre era camionero y renegaba de todo lo artístico mientras un Franco influido por el rock de la potencia norteamericana ocupante era un aficionado a la guitarra. Una vez huérfano Battiato emigró a Milán donde trabajó en una editorial de pasatiempos mientras los capitostes de las discográficas pensaban en lanzarlo como un cantante melódico más de los 60 con canciones como “La Torre” o “E´lamore. Pronto se cansara de la música romántica  y se pasara a la música académica con  el minimalismo electrónico de piano y violín, sonidos y voces distorsionadas que le llevaran a ganar el premio Stockhausen para creadores musicales, los discos de esta época son aún difíciles de encontrar en Italia. Sin embargo su década triunfal llegara en los 80, en 1979 edita “La era del jabalí blanco”, el jabalí blanco es un símbolo en las culturas celtas y en la canción que así se titula Battiato interpela a la pronta llegada de la era. Battiato como artista no anglosajón rompió muchos moldes vendiendo millones de discos en Italia, España y el resto de Europa. Ahora vive de los réditos en una plantación de vid a los pies del Etna, remasterizando todos sus éxitos, dando recitales y dedicándose a la meditación trascendental. A la espera de cómo dice su canción “La vía Láctea” una nave espacial nos lleve a todos a Sirio. A que nos encontremos todos “La estación de los amores” mientras nos acecha “El animal” que no nos deja tomar ni el café.