Fue un segundo, qué digo, una fracción de
segundo: le puse una caña y al pagarme me sonrió como solo se sonríe a alguien
especial, a alguien con el que estas a gusto, a alguien con el que no tienes
que medir tus palabras o tus gestos, a alguien con el que simplemente eres tú,
siempre.
Luego
me pasé el resto de mi vida buscándola.
BASI
JORQUERA 9-X-2017
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